El síndrome del intestino irritable es un problema en la función del intestino grueso. Puede causar cólicos y dolores abdominales, distensión y cambios en los hábitos intestinales, bien sea diarrea o estreñimiento, o incluso la alternancia de ambos. Aun cuando el síndrome del intestino irritable puede causar muchas molestias, no hay daño en el intestino, es decir, al realizarse una colonoscopia su colon estará completamente normal.
Es una enfermedad muy común, sobre todo en mujeres y en menores de 45 años. La causa no es precisa, se plantea una conjunción de cosas como hipersensibilidad del colon, intolerancia a algunos alimentos y alteración de la microbiota intestinal (bacterias que viven en el intestino). Además no hay una forma específica de diagnosticarla; lo más importante son los síntomas que manifiesta el paciente y descartar cualquier signo que oriente a algún daño en el órgano.
Por esto es importante que el paciente con colon irritable, mayor de 45 años, sea sometido a pruebas de pesquisa de cáncer de colon para descartar organicidad de la enfermedad, es decir, daño o lesiones en el colon. Entre estas se encuentra las pruebas de heces fecales o colonoscopia.
La mayoría puede controlar sus síntomas con dieta, manejo del estrés y ansiedad y su gastroenterólogo puede indicarle medicamentos que ayudan a disminuir las molestias causadas.
Sugerencias para el intestino o colon irritable
Como pautas genéricas en relación a la alimentación podemos destacar:
- Moderar el consumo de fibra insoluble con alimentos; como harina de trigo integral, salvado de trigo, cereales integrales, semillas, lechuga, espinacas, acelga, repollo, brócoli, uvas, uvas pasas, frutas secas.
- Potenciar el consumo de fibra soluble como salvado de avena, salvado de arroz, manzana, naranja, durazno, zanahoria, maíz, brócoli.
- Disminuir el consumo de fructosa (un tipo de azúcar presente principalmente en las frutas): aguacate, limón, arándanos, fresas, manzana, frambuesa, sandia, toronja, melón.
- Eliminar totalmente el consumo de especies picantes, el gas, el café y el té.
- Beber dos litros de agua al día. Puede consumir aromáticas como tilo, cedrón o cidrón.
- Es necesario controlar el estrés.
Es importante que aprenda a conocer su colon. Las sugerencias en relación a la alimentación no son una regla estricta. Existen ciertos alimentos que no están en estas sugerencias.